Por desgracia, después del domingo llega el lunes, y eso supone volver a la rutina, por lo tanto los domingos (al menos para mí) son un poco tristecillos y aburridos. Así que para cambiar un poco y que no sea todo tan monótono me he propuesto hacer un dulcecito diferente cada domingo.
Como tenía un libro de cocina magrebí, he aprovechado para sacar las recetas de los postres. Y entre mi madre y yo (gracias a ella las cosas salen como tienen que salir :D) hemos elegido este dulce porque tenía una pinta buenísima y bastante golosona.
Según el libro se llama "Samsa", unos barquillos de almendra y sésamo de origen tunecino que con tomarse uno o dos ya te puedes dar por saciado.
Nos hemos pasado un poquito con el sésamo (a mi parecer). Entre ayer y hoy me he atiborrado bastante, son muy muy dulces. Están para chuparse los dedos.
¿Lo próximo? Qué se yo... El libro da para al menos unos cuantos domingos más :)
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2 comentarios:
Ay, qué ricos los pastelitos!!!! Envíame unos pocos juas,juas,juas...
Sí, están buenísimos :-P
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